domingo, 19 de diciembre de 2010

Locura...

Estoy loco, lo admito.

Estoy loco, muevo las manos sin sentido cuando me encuentro a solas, hablo con mi pared, y le pido explicaciones, de cosas que realmente no tienen sentido, que no tienen explicación, además que puedo estar en mi habitación viendo mi reflejo y preguntándome si no es simplemente una ilusión óptica.

Estoy loco, sueño con que algún día las cosas cambiaran, que la sociedad en la que vivo se dará cuenta de todo el daño que hace, que algún día los gobiernos actuaran de manera consciente, que no robaran, ni querrán llegar al poder por el simple hecho de beneficiarse. Simplemente lo harán por ayudar no a un pueblo, sino a unos hermanos que eligieron a un candidato que los represente.

Estoy loco porque soy loco.

Estoy loco porque cuando pienso, oigo una voz que discute conmigo, y muchas veces me encuentro peleando con esa voz, para que me haga caso, para que no me lleve la contraria. A veces simplemente calla, otras veces me rebana los sesos.

Estoy loco, porque aún creo en el milagro de vivir, aún creo que vivir es un milagro, aún creo que hay gente buena y dedicada en este mundo, que lo único que le interesa es un bien común, no un bien personal.
Estoy loco, pero intento ser siempre feliz.

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